Si estás leyendo esto, seguramente sea porque seas bien consciente de la situación global a nivel de desechos con la que contamos a día de hoy, en esta, nuestra tierra. Únicamente el 16% de la basura generada se recicla. Con lo que hasta el más mínimo paso que podamos dar hacia una mejor situación, será siempre recompensado y gratificado por nuestro todopoderoso planeta.
Bien, si deseas saber cómo contribuir a esta mejora y a cómo cuidar de nuestro planeta, por favor, sigue leyendo. Vamos a tratar de darte los conceptos básicos de cómo reducir desechos. Esto se consigue gracias a las famosas 3R, que serían: Reutilizar, Reciclar y Reducir.
Vamos con cada una de ellas:
Reutilizar
¿Qué significa reutilizar, y cómo podemos contribuir a ello? Básicamente se trata de dar una segunda oportunidad a cualquier producto que utilicemos. En vez de tirarlo directamente a la basura, se le puede dar una segunda vida con el mismo propósito, o con uno totalmente diferente, pero igualmente útil en su nueva función.
Puedes basarte en tu imaginación para transformar absolutamente todo lo que ya no utilices. De cualquier modo, aquí van unos cuantos consejos para que vayas haciéndote a la idea de cómo funcionaría esta reutilización:
1. Aficionándote al bricolaje y dándole vida a nuevos accesorios para tu hogar. Con cualquier elemento que ya no necesites o que se encuentre muy deteriorado, puedes crear algo totalmente nuevo.
2. Crea nuevos artículos de moda con la ropa que ya no desees ponerte, o incluso crea bolsos o carteras con ellos, con las toallas y sábanas, puedes crear trapos, fundas…
3. Frascos, Tarros, Cajas o cualquier otro elemento en el que vengan los productos que compras, se pueden reutilizar para albergar productos nuevos de todo tipo y organizar así tu hogar.
4. Si tienes huerto, puedes crear tu propio abono con desechos orgánicos.
5. Ningún aparato electrónico se tira sin antes haber intentado repararlo.
6. Alquila todo lo que se pueda alquilar en el mercado. Existen tiendas de alquiler de actividades de ocio, artículos de moda, vehículos…
7. La compra de productos de segunda mano está en auge y hay que apoyar este mercado.
8. Cualquier producto que vendan en el mercado que no sea de utilizar y tirar y que se trate de productos con una larga vida útil, son un imprescindible (pañuelos, algodones de varios usos que se limpian, la copa…).
Reciclar
De este concepto estamos seguros de que has oído hablar más veces. De todos modos, un refrescar la información nunca viene mal. Reciclar se basa en transformar materiales usados, en unos totalmente nuevos. Estos materiales pasarán a ser de nuevo utilizados, en productos originales.
Pero esto, no lo podemos hacer nosotros mismos en casa. Lo que tenemos que hacer es separar cada artículo y depositarlo en el contenedor correspondiente situado en la mayoría de calles de nuestro país. Una vez ahí, se llevará todo a las plantas de reciclado, para que sean ellas, quienes se encarguen de realizar las funciones correspondientes.
Perfecto, ahora nos falta conocer qué elementos se pueden reciclar, y en qué contenedor, o en qué lugar depositar cada uno de ellos. Pues atentos que ahí va la información necesaria:
- Contenedor Verde: Todo el vidrio.
- Contenedor Amarillo: Los envases de todo tipo (plásticos, aluminio, hojalata…).
- Contenedor Azul: El papel, esto incluye también al cartón.
- Contenedor Marrón: El famoso orgánico, que viene a ser todo residuo proveniente de alimentos.
- Contenedor Gris: Para el resto. Es decir, basura doméstica que no entre en ningún otro apartado. Léase plantas, polvo, corchos…
- Contenedores de Residuos Peligrosos: Las pilas, muy importante reciclarlas.
- Puntos Limpios: Seguramente tu localidad o una cercana, tenga un punto limpio en el que depositar: Electrodomésticos, Muebles, Bombillas, Juguetes, todo tipo de objetos, y muy importante, el Aceite con el que hayas cocinado.
Reducir
Llegamos al último concepto, que es el que trata de reducir. Pero, ¿a qué nos referimos con esto de reducir? Lo que viene a representar este concepto, es el reducir el consumo de productos en lo máximo posible. De este modo, a menos productos consumidos, menos desechos producidos.
Seguramente esto te suene extraño, ya que tú tienes ciertas necesidades, que sí o sí, las debes de satisfacer. Pero, existen modos y técnicas para conseguir este propósito, las cuales vas a entender rápidamente con los siguientes ejemplos:
1. Llevar encima tu propia botella o termo y recárgala de agua en fuentes. Nada de comprar botellitas de agua por el camino.
2. No pidas bolsas en las tiendas, llévate la tuya siempre encima.
3. Reduce el uso de papel impreso, hoy en día y con el móvil en el bolsillo, puedes leer todo desde el dispositivo, y también almacenarlo ahí, o en la nube.
4. Utilizar bombillas de larga vida útil, las hay que llegan a los 15 años tranquilamente.
5. Artículos de batería recargable, o que funcionen con energía solar o a través de cargadores.
6. Comprar productos de tamaño familiar, y si se desea se transfieren a envases de menor tamaño caseros.
7. Productos en general, de todo en uno. Mejor que tener específicos para cada necesidad.
8. Cultiva tus propios alimentos, ahorrarás en los embalajes que suelen traer.
¿Será esto suficiente?
Lamentablemente, no somos capaces de decirte si con estos consejos, conseguiremos solventar el problema. Pero lo que sí que podemos decirte, es que esto se trata de ser conscientes de la situación, y cambiar nuestros hábitos de consumo.
A más personas concienciadas, y a más personas tomando acción, más posibilidades existirán de conseguir unas mejores condiciones para nuestro planeta.
Cómo ya se dijo en su día: “Es un pequeño paso para el hombre, pero un gran paso para la humanidad”.